ESTOY
AQUÍ PARADO
Estoy aquí,
parado en el centro de la tierra.
Aquí donde la
tierra ama todos los arrebatos.
Parado como
una flor en la estación perfecta
canto y mi
poesía es una voz entre las voces.
Llegué hasta
aquí
dejando en el
camino
todo lo que
tenía.
Los caminos
eran tan abruptos
que hasta mi
ser me pesó
y tuve que
dejarlo.
Fui la
sangrante Pampa desolada.
Agreste
paraíso
el de las
contradicciones.
Absurda
paradoja la del hombre.
Abro mi
corazón
y en mi
corazón no encuentro nada.
Solo un poco
de sangre
músculos en
perfecto funcionamiento
y un poco de
pus
porque vi
morir mucha gente.
Vi morir
personas de todos los colores
Blancos y
Negros por los mismos motivos
y por motivos
diferentes.
Vi morir por
carencia
y vi morir por
exceso.
Por la boca y
también
vi morir por
el culo.
Un hombre este
siglo
murió
en medio de la
selva
y en los
palacios
y hasta con la
cabeza
metida en
plena mierda.
Vi morir mis
propias ideas.
Mis propios
deseos como hombre.
Este siglo vi
morir a Dios
y en mi
regazo, también,
a punto de
morir la poesía.
Inutilizada
por la moda.
Mal vestida
para que su ser
sea la fiesta
que la nombra.
Llena de flores
y de muertos
pequeños
llantos más que gritos.
Pequeñas
vueltas de la vida
más que
grandes viajes.
Miguel Oscar Menassa
De “La poesía y yo”
Leído por Maribel
Domínguez Duarte
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