viernes, 30 de noviembre de 2018

SEGUIRÉ REMANDO


SEGUIRÉ REMANDO
                                                             A mi padre      

No logrará la desgarradura del tiempo
perteneciente a las ásperas horas
estancadas en el dolor,
ni el enjambre de los ruidosos días venideros
vaciar las íntimas celdas
donde habita tu presencia.

Resuena en voces ajenas
una cordial sonrisa
posada en la dignidad de una ventana vacía.

Farina bebe vino  amargo para nunca olvidarla
estalla una mueca de orgullo
dirigida a tu piel labrada
de navegante abnegado.

Albergo tu sangre, latiendo,
remando  hacia lejanos puertos
aquellos que nombrabas:
Casablanca, Añadir, El Gran Tarajal…
Emprendiste nuevos pasos en la árida meseta
trabajando con tenacidad
amando con tesón
en un sólido pilar
compuesto por el fulgor de este amor inextinguible
que siento muy adentro.

Tus cansados huesos
asumieron la ley implacable del tiempo.
Descansa tranquilo,
compartiste toda la bondad de la que estabas repleto.
Te cubre, para siempre,
un bello recuerdo encendido.

Maribel Domínguez Duarte
De “Nombre de mujer”

miércoles, 28 de noviembre de 2018

CAMPESINA


CAMPESINA
(Poema dedicado a la mujer trabajadora)

Con tu semblante gallardo, mirada firme,
esperando el alba que alumbra la campiña
extendida a tus pies, abierta en surcos,
ansiando la sutileza moldeadora de tus manos.

Mujer campesina, sin descaso  de sol a sol,
Elaboras cultivos que devuelven la sonrisa lustre,
al fruto de la cosecha, fraguada de siglos y siglos
sin pronunciar un lamento.

Con mandil ceñido en la cintura,
tu gracia depositas en cada siembra,
difundiendo semillas de pasión por doquier,
esparcidas de acre en acre,
de solsticio a equinoccio
albergando la gratitud de una buena labranza.

 Alimentas pucheros, con el fruto de tu  afán,
coraje artesanado, por muchos olvidado
caminas por la dura afrenta del tiempo
con el único consuelo de una luz,
al pie de la chimenea.

A ti  vuelan estas estrofas al viento,
que germinan alas de fulgor sobre un calendario
evocando las tareas que se ciernen
sobre la ardua trinchera de tu  escenario,
dividido en zanjas encaminadas al atardecer
perdiéndose  en el confín de un horizonte azulado.

Gloria Gómez Candanedo

LA FLOR DEL PECADO


LA FLOR DEL PECADO

La flor despertó el deseo
dibujado en una imagen prohibida.
Envolviendo a la noche,
los gemidos de loba
se ahuyentaron en el silencio.

Flor de labios recelosos,
de húmedos pistilos
que bordean una sombra.
Dos cuerpos desnudos,
la savia de dos mundos
encontrados en el abandono.

Una flor que esconde una verdad
en otro lugar,
alejando a la presa de oro
que desfila en sus redes.

Una flor  de pétalos grises,
colmada de besos y abrazos rotos,
encendida con la llama
de unas sábanas mojadas,
envuelta y adornada de lujuria.

Sus semillas cantan,
brotan del viento,
polinizan alas carnosas
que brillan en una mente falaz.

Deshojada a la desnudez prohibida,
en el laberinto de deseos,
en una habitación desnuda
de una tierra colérica
por un pecado que nunca cometió.

Sigilosa, en la metamorfosis encarcelada
que desciende por la roca hacia el abismo,
abriendo sus pasos al placer de la carne,
estalla en la furia, entre gemidos de ángel.

Esther Núñez Roma



lunes, 26 de noviembre de 2018

PRESENTACIÓN DEL LIBRO "NOMBRE DE MUJER"




PRESENTACIÓN DE NOMBRE DE MUJER


Qué decirles hoy en la presentación de vuestro primer libro. Me dejaré llevar y la poesía anticipando la realidad, producirá toda novedad.

Ellas son tres mujeres que viven, trabajan y ejercen su libertad en Alcalá de Henares. Nacieron por primera vez en otros lares. Nadie en sus barrios,  ninguna raíz aseguraba travesar la frontera de la escritura, sin embargo pactaron con la poesía y ocho años después son otras, son autoras.

Saben que solas nada pueden, saben que el trabajo de leer tiene consecuencias, saben que cuando una mujer desea escribir construye la verdadera historia de la humanidad. Tres mujeres en perfecto desacuerdo, mostrando que lo social nos produce, que la poesía es un arma cargada de futuro porque el decir del poeta permanece en lo no dicho. Y si cito a Heiegger a Celaya a Menassa, es porque fueron acunadas por la poesía escrita y leída entre todos.

No es fácil para una mujer cumplir con su deseo, no ceder ante las infinitas invitaciones del pasado, los frecuentes prejuicios del presente y el temor irracional a dejar de ser amadas. Y sin embargo, y ahora las nombro por su Nombre de Mujer: Esther Núñez Roma, Maribel Domínguez Duarte, Gloria Gómez Candanedo, ustedes se encuentran cada domingo por la tarde con la función poética que coordina vuestros pasos.

Hoy estoy muy contento, algo emocionado al escribir la presentación, orgulloso por presenciar cómo crece lo recién nacido y alegre por escuchar grupalmente, en cada voz, la singularidad de las diferencias.

El libro está publicado por la Editorial Grupo Cero, un óleo encuadra la carátula titulado “Cuando la mujer desea” de Miguel Óscar Menassa, director de la Escuela de Poesía Grupo Cero, a la que pertenece el taller de Alcalá de Henares.

El poemario se estructura en tres significantes: El barrio, Atravesando la frontera, Raíces. Algunos dibujos en el interior escuchan la conversación que los 64 poemas mantienen entre sí y en la contraportada podemos leer el extracto de su recorrido poético y el acuerdo de un cadáver exquisito.

PRESENTACIÓN DEL ACTO "NOMBRE DE MUJER"







Buenos días,

“El libro es fuerza, es valor, es alimento; antorcha del pensamiento y manantial del amor”. Dice Rubén Darío.

Me llamo Yosune y en nombre de la editorial Grupo Cero, ¡bienvenidos!.

25 de noviembre en Alcalá de Henares, conmemoramos que hace 20 años fue nombrada ciudad patrimonio de la humanidad, también dos décadas han pasado desde que se inauguró nuestro taller de poesía Grupo Cero en esta ciudad. Pero además, nos hemos reunido hoy aquí para celebrar la publicación del primer libro de poesía de mis queridas compañeras Gloria, Maribel y Esther, titulado “Nombre de mujer”.

Entiendan que la emoción me embriaga en estos momentos y me enorgullece decirles que a continuación nuestro coordinador el Dr. Carlos Fernández del Ganso presentará dicho poemario. Dando paso a las autoras para que nos deleiten con la lectura de una selección de sus fantásticos poemas, fruto de un gran trabajo.

Finalizaremos con dedicatorias y firmas de los ejemplares a los que queráis adquirirlo.

Sin más dilación, les dejo con el Dr. Carlos.

Muchas gracias y disfrutad.

jueves, 22 de noviembre de 2018

TE CONOCÍ ALCALÁ DE HENARES, ENTRE LOS MEJORES


TE CONOCÍ ALCALÁ DE HENARES, ENTRE LOS MEJORES
A los compañeros del Grupo Cero

Sonó el teléfono, es una demanda social.
¡Buscan médico de urgencias en una clínica de Alcalá de Henares!
Son guardias nocturnas, fines de semana
de veinticuatro horas y pagan poco, tú verás…
¡¡¡Acepto!!!
Te necesitan mañana uno de julio a las nueve de la noche.
“No conozco la ciudad ni tengo coche,
estaré allí a las ocho”.

Con un apretón de manos cambié el delantal por bata,
mil pesetas vendiendo peces de colores
por quinientas de recién licenciado.

Y conocí los límites del cuerpo desprovisto de salud,
la sombra encadenada de dolor en el pecho de la culpa,
el grito ausente de doña Angustias por no poder gozar,
a don Narciso con su fiel úlcera femenina de siempre,
al sargento que no puede dormir en su garita
sin el aguardiente reglamentario y a la maestra celosa
de su belleza en el espejo de la infancia.

También hubo sangre,
porque de noche la carretera es ciega,
el maltrato de la cruel ignorancia es locura familiar,
los niños agitan  sus almas desnudas desde la cuna
y al despertarse lloran las pesadillas con alguna febrícula.

Todas las edades tienen sexualidad y goce posible
desde la demencia del que no sabe volver a casa de los sueños o
la adicción del que no supo huir por las rendijas de la vida.

No cedí en una muerte más, antepuse premisas para ejercer
si de noche trabajo, a la mañana estudio y por la tarde…

En la ciudad de las tres culturas conviven los valientes,
puerta de la capital, crucial en la batalla entre hermanos,
visité tus bibliotecas, celdas y colegios.
El hospital sin terminar y a media hora de la muerte,
la poesía  inundó cada hogar de templanza y las cigüeñas
consiguieron celebrar su patrimonio de humanidad.

Atendí lo que nadie quería, recibí a don insólito, a doña inaudita, al comisario incrédulo, al comandante Pelele, a los amantes sin destino y era tal la cantidad de aullidos, que pedí refuerzos a la magistral sabiduría y fuimos tomando posiciones.

Difundimos revistas en las guarderías de cada mirada,
libros donamos para leer en voz alta en  las iglesias,
a los jueces dimos clases de ética en el juicio de atribución
y al síndrome del recomendado recetamos hablar
todas las semanas y cantamos con las profesoras
la tabla de la ilusión y el crecer lo diferente
tuvimos desertores y algún muerto enterramos.

Los talloos caídos de secar lágrimas guardamos
en museos hurtados al pasado,
allí donde nadie habla cuando algo se descubre.

Las mujeres torturadas y ocultas durante siglos,
como almendras garrapiñadas por la pasión
acudían en oleaje de todos lados.
Mujeres que nunca habían llorado,
mujeres sin perdón ni olvido, mudas ancianas,
niñas jugando a ser la madre del futuro ruiseñor,
pedían hablar sin temor.

Tantas mujeres recibimos, tanta alegría sentían
de ser escuchadas que un día contratamos
una emisora de radio y con la fuerza del verso
los jueves declamábamos:
¡señora María, es la hora del Poeta del Mediodía!
ya nunca  habrá semana sin amor, don mejor sin poema,
niño sin lapicero, ni grupo sin director,
enamorados de las semillas del cantor.

Y cuando para seguir creciendo, por ley,
nos dividimos en pedazos exactamente desiguales
y compramos suelo, estábamos aceptando la deuda
que no se puede condonar:
¡entre los mejores, fuimos los primeros”.

Y hubo tormentas, donde la ceguera era muda y
el vaivén del río en su cadencia de volver el
cauce del pasado trajo melancolía.
Sabemos que la depresión sin tratamiento adecuado
se instala en el pensamiento y enferma el cuerpo.

Estas tres décadas de trabajo está documentadas,
no olvido que otros de aquellas gestas nacieron
y hoy podemos con alegría, cantar, pintar, actuar,
jugar,  bailar y recitar que en Alcalá de Henares
debutó nuestra primera juventud.

Carlos Fernández del Ganso
De “La máquina del tiempo”

miércoles, 21 de noviembre de 2018

CARTA DE FIN DE AÑO 2015


CARTA DE FIN DE AÑO 2015

A Pilar Rojas

Amada compañera en la producción del tiempo,
a veces la lluvia se hace intensa y el sol pinta sombras
que trepando las paredes del hogar
alcanzan el techo del olvido.
A veces la noche no llega nunca y nos desploma el sueño
abrazando con tierna pasión nuestros cuerpos.

De trabajo y estudio se hizo tu nombre
pleonasmo del ejemplo.
Aún se recuerdan los festejos nupciales
con ibéricos, trufas y carabineros..
En Roma hicimos el amor,
en la hermosa Florencia poco pudimos.

Al cumplir los cincuenta
la danza árabe se bailó en las cátedras de medicina
y embajadores de lejanos puertos
cantaron enamorados tus versos.
Después de los dispendios compré un aeroplano amarillo
para que tu rojo cabello volara libre en las antípodas del azar
y fue un chiste recibir la plusvalía, por escribir,
en el mercado del futuro.

¡Cómo no te voy a querer!
Si estudiabas con atlas de anatomía sobre mi cuerpo
y hoy tu criterio buscan en los libros los hombres de ciencia.

Por eso quiero brindar y gozar de las diferencias
entre lo realizado con tu bella maestría
y el temple afortunado del vivir, sin saber cómo, a tu lado.

Actualmente estoy trabajando para liberar
al enamorado del pasado
con esa energía disponible publicar libros
y después donarlos desde el aeroplano al vecindario.

¡Mujer que emigró tres veces por una profesión sin par!
hace cuarenta años comenzamos juntos a estudias
y hoy quiero declarar que mientras impartes conferencias
sobre el inconsciente y el sistema inmunitario
yo me encargaré de regar las hortensias del goce,
pintar de rojo  blanco los claveles del deseo
y cultivar poemas de amor cada cinco de febrero.

Carlos Fernández del Ganso
De “La máquina del tiempo”



martes, 20 de noviembre de 2018

JURO POR APOLO EL MÉDICO Y ESCULAPIO POR HYGEA Y PANACEA....


“JURO POR APOLO EL MÉDICO Y ESCULAPIO POR HYGEA Y PANACEA…”
Al Dr. Vicente Marqueta

El médico no renuncia, su are vive, si escribe.
La voz jura y miente cuando necesaria firmar el nacimiento
o estudia y calla cuanto se precisa la ley del enterramiento.

Te conocí el siglo pasado,
cuando la humanidad moraba en el tiroides,
el páncreas era una fábrica de caramelos y
un juicio clínico siempre obtenías del colega compañero.

Buscando en los bolsillos de las mil batallas hospitalarias
encontré un poema y una receta para volver a casa:
te quedas en este renglón y no descanses más
de lo necesario.

Busca la alegría entes recuerdos y comienza un nuevo viaje.

Preside el consejo de sabios del barrio o aprende
a tocar el piano.
Vicente: el médico no enuncia, su are vive, si escribe.

Carlos Fernández del Ganso
De “La máquina del tiempo”

sábado, 17 de noviembre de 2018

PRESENTACIÓN "NOMBRE DE MUJER" en Santa. María la Rica


Tenemos el placer de invitaros a la presentación de nuestro libro de poesía en Alcalá de Henares, el domingo 25 a las 12 horas.
Os esperamos.

martes, 13 de noviembre de 2018

¿EL EXILIO DE SIEMPRE O EL MODERNO EXTERMINIO?


¿EL EXILIO DE SIEMPRE O EL MODERNO EXTERMINIO?
                                                                                                  
“Miles de profesionales abandonaron España, buscando trabajo”.
Leído en la prensa el 28 de julio de 2016.

Cuando el tonto del barrio te saluda con amabilidad
ofrece su talento para vivir del cuento.
Cuando el empleado no fabula antes de las vacaciones
el cansancio se alojó en su alma labriega.
Cuando los amigos festejan con alegría los recuerdos
y sonríen en tu casa los fantasmas del pasado
llegó el tiempo del ocio veraniego.

En mi pueblo los tontos trabajan todos los días
su almuerzo y  generan la plusvalía necesaria
para se legislados con templanza y esmero.
En mi barrio y  en mi  ciudad se tira comida a la basura,
libros y niños se tiran a la basura,
también algún hambriento cae de cabeza al contenedor
en su avaricia diaria.

Rodeado de guerras, estafas y amenazado
permanentemente por lo pero que vendrá,
los pactos mantienen mis pasos.
Ella, deseo de mujer, me concede libertad para gozar y
Él, amor de hombre, puso en mis cuentas dinero para viajar.

Unas vacaciones sin malgastar, nos dice Europa.
A la vuelta habrá que competir para ganar
todos los campeonatos posibles y hacer público
el nuevo escenario para seguir conversando
de lo exquisitamente humano.

La edad para amar, la edad para viajar, para jugar o
la edad para morir, se puede pactar
negro sobre negro en un documento y lanzarlo al mar
para observar cómo se hunden los lamentos ciudadanos
así sucede en el barrio, en mi ciudad o en nuestro país
cuando los tontos no pueden conversar, ni sonreír,
ni hacer gobierno.

Carlos Fernández del Ganso
De “La máquina del tiempo

lunes, 12 de noviembre de 2018

Presentación de "La Máquina del Tiempo" de Carlos Fernández del Ganso


Presentación de La Máquina del tiempo por Luis de Blas






Presentación del libro LA MÁQUINA DEL TIEMPO
de Carlos Fernández del Ganso

Señoras y señores, amigas y amigos todos:

Ved aquí a un servidor, presente en el umbral de este acto en nuestra alcalaína y magna Casa del Libro aceptando la invitación para –junto a mi admirada escritora, la novelista laureada, Teresa Galeote—poner en vuelo la noticia de la publicación del poemario LA MÁQUINA DEL TIEMPO, editado por el Grupo Cero de Poesía y Psicoanálisis y cuyo autor es, desde hace bastantes años, mi amigo y reconocido poeta, Carlos Fernández del Ganso.

domingo, 4 de noviembre de 2018

LAS MANOS DEL OTOÑO



LAS MANOS DEL OTOÑO

Llegan algo rugosas,
pero llenas de caricias,
algo desgastadas quizá,
más, entre sus dedos guardan la sabiduría
adquirida en los trenes diarios que van y vienen,
llenos de gentes portando una historia en el semblante.

Algo ásperas también,
la dureza del tiempo hizo su mella
entretejiendo sonrisas al amanecer,
queriendo soportar el arduo trabajo,
elevando miradas a la sorpresa de la vida
que cada día rompe algún trasiego.

Suaves cuando la piel tersa lo reclama,
el árbol erguido pide una caricia sin dolor,
y el retozo sosteniendo el riego de la pasión
con la destreza del otoño.

Fuertes,
dejaron la finura en el arcón de la desdicha
que cruzó el camino sin avisar.
En cada línea se divisa el recorrido
de diferentes amores y sus ramificaciones
a futuros desconocidos.

Más aún permanecen firmes,
capaces de elaborar el pan más tierno,
capaces de señalar nuevos desafíos a la locura,
poner el rasgo necesario en la contienda,
arrancar las fauces al enemigo.

Sabias en la entelequia,
tuvieron la primera caricia en la primavera,
verde, virgen, atónita.
Han pasado el verano con la refulgencia
que caracteriza, dando vuelo a la locura,
escribiendo frases bajo la luna,
dejando un poquito de suavidad
en el remanso del otoño.

Ya han litigado en otras guerras
y han bregado en otros arados,
han sentido la piel tersa removerse al tacto,
reconociendo temblores diversos,
también el vacío de los adioses.

Pero el otoño las tiñe de sensualidad,
no temas, amor,
sabrán acomodar el atavío
en el lugar del vértice.

Traen la exuberancia recogida
de campos alejados,
ahora tienen la maestría
abordada en éxitos y fracasos,
en días de lluvia y frío
y noches tentadoras al ocaso.

Conservan la firmeza del beso mas sereno
con la locura del estruendo
han aprendido a distinguir
el susurro de una piel
en la llamada vesperal.

Ya no quieren brillar en soledad.
Ya no ambicionan el mejor atardecer.
Ya no pretenden alzar el vuelo sin rumbo.
El verano se fue de vacío,
y el dorado es otro color.
Amar es la aventura.

Gloria Gómez Candanedo