martes, 26 de octubre de 2021

jueves, 14 de octubre de 2021

IRÓNICO DESAFÍO

 


IRÓNICO DESAFÍO

“Decir lo que dice el río,

larga palabra semejante a labios,

larga palabra que no acaba nunca.”

Octavio Paz

 

¿Nace el agua de frotar dos palabras húmedas

por las lágrimas de los que algún día treparon por el insulto,

para embravecer un océano de justicia sumida en la derrota?

¿Es el pelícano el pico de aquel jornalero que, cavando su

propia tumba y labrando un poema

con esos dedos de tierra y sal,

¡oh saco gular!

almacena escamas para vestir las pieles

con una armadura de palabras?

 

Vencer es un instante,

también un camino que forja la cerradura,

una explosión de partidas donde un pececillo de plata,

insecto de traza apolínea, devora la cola de encuadernar

libros, deshaciendo, en el movimiento,

un árbol de hojas con la sombra del caballo de Troya

abriéndose a la luz.

 

Y no es un irónico desafío, es la realidad del cíclope,

aquel que por su ojo desintegra esperanzas

y cuencos vacíos, hambre y sed

de una página en blanco, de unas palabras

que puedan construir un cuerpo de gigantes

y un David que alcance, con su honda,

un magnífico sueño.

 

Laura López García

Del libro: “Sueños de papel”

Cuadro: "El sueño dorado" de Miguel Oscar Menassa

martes, 12 de octubre de 2021

EL BARRIO


EL BARRIO

 

Sueño despierta

y los pensamientos vencen lo inanimado.

Me mantengo suspendida en el abismo

donde las piedras pierden su fragancia.

Ya a flote, la claridad del agua

demarca el rostro vencido.

 

Desafiando a la muerte amanece un nuevo día.

El aroma despierta inquietudes de abrazos

añoranza de los besos,

el rostro habla en el espejo

como el verso al que todos pertenecemos.

 

Una tarde de domingo…

al fin estrenaría el vestido de flores

prendido de infantil aroma,

ya la mirada de mi padre dio su aprobación.

 

En fila de a dos marchamos,

advertidos que en la calle todo muere,

asombrados por rayos de sol

que dibujan líneas intransitables

donde la transeúnte algarabía

escondida detrás de una sombra

resonará en la noche.

 

Esas tardes de domingo…

Arriba, en la terraza, la de la falda larga

cantando mientras tiende nostalgias de antaño.

 

En la tienda, el panadero

avivando con la masa entre las manos,

moldeando a su amada, con harina de simientes.

En la esquina de aquel bar, leyendo el periódico,

el vecino del sombrero pardo,

con su bigote y pipa haciendo piruetas,

y la sospecha de que hoy llueve.

Murmullo de aquellas gentes…

el ladrido de un perro en el funeral del día.

 

Aquel barrio no morirá jamás

ya no nos pertenece

y se ha de vencer la batalla

donde los soldados conservan la misma firmeza.

No volveremos a salir en fila de a dos

como colegiales asustados después de una despedida,

ya los temores arrullados, se desvanecieron.

 

Esas mañanas de domingo estrenando el nuevo vestido,

la mirada de mi padre,

en fila de a dos,

la de la falda larga,

el panadero con sus deseos,

el vecino del sombrero pardo,

el murmullo de las gentes,

el ladrido de aquel perro

y la muerte que engalana

la ciudad sitiada de recuerdos.

 

Mi padre y mi madre

abrazados en el funeral del día…

y la muerte que nos anuncia que sin ella

nada muere.

 

Esther Núñez Roma

Del libro: “Nombre de mujer”

Cuadro: "Ecos del reloj" de Miguel Oscar Menassa



domingo, 10 de octubre de 2021

ALMA DE ACERO



ALMA DE ACERO

 

Si lloviera y la lluvia fuera roja

pensaría que los tejados se han prendido

y que el agua tiene fraguas

y tizones escapados de un incendio,

pensaría que el fuego le roba los colores a la lluvia.

 

Pero mi corazón es un pagano, un impío,

un vasallo que saquea y abandona.

 

Si leyera en las palmas de los lobos

interpretaría los juramentos de las víctimas,

la sordidez y la resignación

que recorre los desiertos.

 

Pero mi sueño es imposible, y las estrellas,

albergan oscuras intenciones.

 

Si pudiera desprenderme de los ritos de la niebla

comprendería las injurias, el origen de los ecos,

la impasible ordenación del universo.

 

Pero no son rojas las balas,

las que dispara el aire,

el aire se confunde,

y mi alma está en el cuero del combate

con un escudo ciego.

 

Pilar García Puerta

De “Patria de pájaros”

Cuadro: "Relámpago cero" de Miguel Oscar Menassa

sábado, 9 de octubre de 2021

EL POETA POBRE

 


EL POETA POBRE

 

El poeta, pobre, con sus manos,

con su sola destreza, sus vanas,

enérgicas bocanadas de tiempo

abriendo las branquias del mundo.

 

El poeta, pobre, con sus garras de marfil

royendo sueños,

con sus amores, sus pequeñas verdades

siempre incompletas;

mercancías que flotan

en el alma como el aire…

 

Con su oro de barro

y carne sin curso…

Un gran precio atesorando deudas

y otras cifras

                        de volar indescifrable.

 

Kepa Ríos Alday

Del libro: "Letras y números" 

Cuadro: "El poeta encandilado" de Miguel Oscar Menassa

jueves, 7 de octubre de 2021

ATRAVESANDO LA FRONTERA

 



ATRAVESANDO LA FRONTERA

 

Deshago lentamente

encorsetados pasos envueltos en pasado,

sacudo el hastío prudente de una cadencia sin amanecer.

 

Y embriagada por la calidez de una mirada

arrastrada por el crepitar vivaz de una pasión,

camino por la cuerda floja de tus devaneos

plena de goce

buscando el contorno de tu boca

que sucumbe a nuestros cuerpos indómitos,

entrelazados

y al fuerte oleaje de este delirio, ardiente y profundo,

donde aún permanece el vestigio de placer

de aquel abrazo prolongado hasta la alborada,

de aquellas manos perdidas en las caderas

y de un talle arqueado, enfurecido

deleitándose en tus brazos

en tu cálida piel

atravesando la frontera del deseo voraz,

pertinaz, implacable

que repita tu nombre

buscándote,

hasta encontrarte hasta tenerte, de nuevo y  una y otra vez.

 

Maribel Domínguez Duarte

Del libro: “Nombre de mujer”

Cuadro: "Placeres secretos" de Miguel Oscar Menassa


 

miércoles, 6 de octubre de 2021

LOS QUE SE HACEN UNA BOCA DE OSCURIDAD

 


LOS QUE SE HACEN UNA BOCA DE OSCURIDAD

 

Sabíamos, pero no sabíamos.

Siglos en nuestros bolsillos, calma atada al porvenir.

Sabíamos pero no sabíamos qué éramos nosotros.

Las manos amigas van a la comida y el cuello es el arma

de longitud con que los murciélagos sustraen a los transeúntes

lo últimos sueños de occidente.

Mal, de una palabra y sus destinos.

Los bailes se hicieron aburridos.

Rufianes apocalípticos, auténticos sentidos de la noche,

nuestro carácter de ventilación. Soledad sobre las mesas.

Cartas boca arriba, catapulta al paraíso de la esclavitud.

Ah! dulce carne cuando nos manteníamos en la distancia.

Ahora, la piel que habito, se debate por ser.

Renunciar a nada.

¿Quién? Me pregunto ¿sabe su camino?

¿Quién contrajo matrimonio con la muerte?

Circularidad de la palabra. ¿Quién envidia?

¿Y quién tumulto en que navegan las embarcaciones?

Las olas sueñan pájaros en libertad.

Bocas de negrura contenida. 

Moderación de olvido y esta noche la reina es la desidia,

el tiempo del orgasmo pleno, como cataratas de luz golpeando lontananza,

donde mis propios esclavos, batallan con la muerte.

Bocas infinitas de pájaros sin cabeza, pájaros de frenesí,

azuzando el cuerpo de las tinieblas.

 

Virginia Valdominos

De “Vamos a trabajar”

Cuadro: "Galope mortal" de Miguel Oscar Menassa

EL VOLCÁN DE TU BOCA

 


EL VOLCÁN DE TU BOCA

 

Fui un pirata

que jamás escondió sus tesoros,

soy el que vendió sus manos al metal

para fabricar los garfios del amor.

 

También fui un lanzallamas

en el volcán de tu boca,

donde hielo y magma

son el adalid de tu voz.

 

Oigo cantos de un preludio final

y recuerdo tu nombre en mis manos,

firmando del revés

todos los testamentos

de aquella muerte ilegible,

en el universo acústico

donde el eco extranjero de la sangre

nació volando alrededor de tu corazón.

 

Adrián Castaño

De “Rock & roll”

Cuadro: "Nacimiento del fuego" de Miguel Oscar Menassa

martes, 5 de octubre de 2021

HAY UNA LÍNEA QUE COMPARTE

 


HAY UNA LÍNEA QUE COMPARTE

 

Hay una línea que comparte

continente y contenido,

como vagina ciñéndose,

acompasada sensación pulsátil

alrededor de tu enhiesto miembro varonil.

Nos contorneábamos al son

de músicas paradisíacas

y la mañana se abría azul

como anhelantes ojos.

Vuelve perversidad infantil

para gozarte,

rompe los absurdos límites

de esta congelada geografía.

Lleva de los profundos pliegues

de mi piel,

el sudor de mil lágrimas como lagos.

Vivamos,

este instante, donde juntos,

tocamos el cielo.

Anclados en el amor

como raíces a la tierra.

Perforada y a la vez

rígida línea entre ser y no ser

vida,

no conocerás la muerte.

Tu estirpe conservará años tras años,

tus palabras

viajarán a siglos venideros.

 

Olga de Lucía Vicente

De “Agua fresca”

Cuadro: "De vuelta al hogar" de Miguel Oscar Menassa

domingo, 3 de octubre de 2021

DESDE MI VENTANA

 


DESDE MI VENTANA

 

Miro por la ventana

cómo el mundo se va convirtiendo en algo hostil

entre los hombres.

 

Se matan unos a otros, y los otros que quedan,

se miran  sorprendidos como si no tuviera que ver con ellos.

 

Devoran los principios básicos de cualquier sociedad

cuando el tacto humano e invisible,

cae sorprendido por saberse algo más

entre tanta naturaleza sangrante de la tierra.

 

Una mujer,

pasa totalmente distraída, queriéndose mostrar

indiferente al ruido que invade la ciudad.

 

Nadie dice nada y la nada es cosa de todos.

 

El policía de la esquina huyó sin dirección,

los animales sueltos conversan entre si

y da la sensación de que se burlan de todo, de todos.

 

Vagabundos activos en presencias imponentes

devoran el asfalto,

ellos son libres, han muerto muchas veces.

 

Y yo, desde aquí, en mi ventana,

miro pasar la vida,

inventando historia que nunca podré contar.

 

Leandro Briscioli

De “Rock & roll”

Cuadro: La Visionaria de Miguel Oscar Menassa

sábado, 2 de octubre de 2021

MUJER

 


MUJER

 

Tiempo atrás, mujer de carne firme y sedosa.

A escondidas, recluía la tristeza a solas.

No le gustaban las preguntas soeces,

paso firme, saboreada cada instante.

 

Por las noches amaba trementina, lienzos.

El día con su frío nacarado, violaba

la celda azul de su piel.

Virtual, escurridiza, alondra entre cojines.

 

Descubría vejez y sonrisas, desarmaba intrigas

volvía al sillón del reposo, desde allí,

palabras como plumosos ropajes desnudaban

el deseo de otro que vivía, pero no vivía.

 

Amaba su cuerpo, festín y vicio.

Cuerpo de palabras, lisonjero cuerpo silencioso y sapiente.

Mujer tu cuerpo, as, naipe,

sobriedad.

 

Stella Cino Núñez

De “Poesía callejera”

Cuadro: "Trazos de mujer" de Miguel Oscar Menassa