miércoles, 8 de febrero de 2017

UN SONETO A CERVANTES


 
UN SONETO A CERVANTES

 
Horas de pesadumbre y de tristeza
paso en  mi soledad. Pero Cervantes
es buen amigo. Endulza mis instantes
ásperos, y reposa mi cabeza.

 
Él es la vida y la naturaleza,
regala un yelmo de oros y  diamantes
a mis sueños errantes.
es para mí: suspira, ríe y reza.

 
Cristiano y amoroso y caballero
parla como un arroyo cristalino.
¡Así le admiro y quiero,

 
Viendo cómo el destino
hace que regocije al mundo entero
la tristeza inmortal de ser divino

 
Rubén Darío

No hay comentarios:

Publicar un comentario