ESTOY ACOSTUMBRADA
Estoy acostumbrada a subir sin ascensor
a los recodos del amor y del dolor.
Estoy encerrada entre las paredes de mi
cuerpo
en su lejana infancia y en su futura
soledad.
Estoy y no estoy entre sus garras
atrapada
cuando me alejo en fugaces fantasías
cuando retorno a tierra y al límite del
cosmos.
Este siglo se acaba y sólo se cotizan los
muertos,
esos que mantienen el nuevo orden de los
vivos.
Estoy embargada por el miedo
tengo el cuerpo en la oficina de objetos
perdidos
no tengo a quien deberme.
Amelia Díez Cuesta
Del libro “Des-nudos”
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