LUZ DEL TIEMPO
La luz, la luz más pura
está en el tiempo,
es su zumo dorado que nos
moja
el alma diariamente y la
desnuda.
Como la luz, como el amor
a veces,
el tiempo es tuyo, y él te
tiene, míralo
morando ya en tu carne
lentamente
posando en ella su ceniza
triste,
sus minutos que brillan
amarillos
y tus labios golpean
tercamente,
y pues no puedes
detenerlo, ahora
que escapa más de prisa,
ya vencidas
tu juventud y tu
esperanza, escucha
cada latido suyo, cada ola
de su invisible,
silenciosa música,
y acecha el don, su luz de
cada día.
Dale tú, en cambio, paz al
tiempo, honda
paz si es que alguna
guardas en tu alma.
Da tu hora al amor, al
beso, al ocio,
pues no es dinero –times
is Money- el tiempo,
y da a tu soledad el
tiempo
oscuro que ella te pida,
y tu minuto abierto
a ese niño que ríe, y a
ese perro
vagabundo que pide pan y
dueño,
y al poema que espera,
y a ese pájaro que vuela
ebrio por el vasto cielo.
José Luis Cano
Cuadro: "Pentagrama de luz" de Miguel O.Menassa
No hay comentarios:
Publicar un comentario