viernes, 4 de julio de 2025

VOCES

 

VOCES

 

He llegado a un paso de todo. Y aquí me quedo, lejos de todo, un paso.

Mirando las nubes he visto que mi pensamiento no tiene su cuerpo solamente en mi cuerpo.

Todos los soles se esfuerzan en encender tu llama y un microbio la extingue.

Más llanto que llorar es ver llorar.

El hombre es aire en el aire y para ser un punto en el aire necesita caer.

Porque te quiero bien, quisiera poder hacerte creer cuanto yo he dejado de creer.

¿Habría este buscar eterno si lo hallado existiese?

No me das nada. Porque cuando nada te pido, no me das nada.

El dolor no nos sigue: camina adelante.

Arrancamos a la vida la vida, para con ella, verla.

Cuanto no puede ser, casi siempre es un reproche a cuanto puede ser.

Tu mano me basta, porque me cubre todo y no es transparente.

Has venido a este mundo que no entiende nada sin palabras, casi sin palabras.

Quien se queda mucho consigo mismo, se envilece.

Algunas cosas me he resignado tanto a no tenerlas que ya no me resigno a tenerlas.

Percibimos el vacío, llenándolo.

Dios le ha dado mucho al hombre; pero el hombre quisiera algo del hombre.

Cuando todo está hecho, las mañanas son tristes.

El ir derecho acorta las distancias, y también la vida.

Todo lo creado, sólo es lo que tú puedes crear con todo lo creado.

 

Antonio Porchia

Cuadro: "Cruces en lo oscuro" de Miguel O. Menassa

jueves, 3 de julio de 2025

DESNUDO Y PARA SIEMPRE

 

DESNUDO Y PARA SIEMPRE

 

Errática,

sin vino,

profesional del fósforo,

cuando tú

haciendo un remolino de ilusiones,

con ese estruendo del laurel,

desnudo y para siempre entraste bajo el agua.

 

Un poco desasida,

como mirándome los pies,

cuando tú,

domingo rápido,

parada del vidrio,

hincase el baño con tu gesto de animal profundo.

 

El agua,

ay,

quedó colgando entre mis ojos y tu carne

como una telaraña,

desnudándote más.

Entendida por el demonio,

bárbara,

tuve un acceso de locura,

un punto apenas de explosión atómica,

un apogeo del clavel preciso

y creí.

 

(Creer es desear tu sexo y darle de comer a una paloma)

 

se fue cayendo

la mañana.

El vicio de la estrella

saliendo así de entre tus párpados

era la luz que

yo he llamado lágrima;

relámpago que empieza aquí y después de verle

no morimos.

 

Carilda Oliver Labra

Cuadro: "Cuerpos entrelazados" de Miguel O. Menassa

miércoles, 2 de julio de 2025

LOS OJOS

 


LOS OJOS

 

Descansa, Maestro, pues estamos cansados, muy cansados,

y sentiríamos los dedos del viento

sobre estos párpados que se nos cierran

húmedos y pesados como el plomo.

 

Descansa, hermano, pues ¡mira! ¡fuera está el alba!

La llama amarilla ha empalidecido

y la cera se derrite lentamente.

 

Libéranos, pues afuera hay hermosos colores,

el verde del musgo y el color de las flores,

y frescor bajo los árboles.

 

Libéranos, pues perecemos

en esta monotonía que no cesa

de feas marcas de impresión, negras

sobre el blanco de los pergaminos.

 

Libéranos, porque hay alguien

cuya sonrisa es más valiosa

que todo el viejo saber de tus libros,

y nos gustaría contemplarla.

 

Ezra Pound

Cuadro: "Los ojos del sueño" de Miguel O. Menassa