RIMA XIII
Del salón en el ángulo
oscuro,
de su dueña tal vez
olvidada,
silenciosa y cubierta de
polvo,
veíase el arpa.
¡Cuánta nota dormía en sus
cuerdas,
como el pájaro duerme en
las ramas,
esperando la mano de nieve
que sabe arrancarlas!
¡Ay!, pensé, ¡cuántas
veces el genio
así duerme en el fondo del
alma,
y una voz como Lázaro espera
que le diga “¡Levántate y
anda!”.
Gustavo Adolfo Bécquer
Cuadro: "Formado de versos y perfumes" de Miguel O. Menassa
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